El cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez reiteró su respaldo a la sentencia 168-13 del Tribunal Constitucional que fija los criterios para otorgar la nacionalidad, y que definió como un instrumento legal para pautar la conducta dominicana en términos migratorios.

“Después de estar en el desorden mayúsculo que hemos vivido, es necesario que tengamos definitivamente un instrumento legal que sea el que paute la conducta de República Dominicana en términos migratorios", manifestó el religioso en su defensa a la decisión del TC que ha originado fuertes y acalorados debates.

Al oficiar una eucaristía con motivo al 75 aniversario de la creación de la Dirección General de Migración, el prelado católico reiteró que en torno al polémico fallo del Constitucional existe una confabulación internacional perversa, de naciones que no tienen autoridad moral para hablar del tema.

“No les luce lo que están haciendo, porque son igualmente o peor, injustos, no tienen autoridad moral para hablar de eso. Nunca han tenido respeto por nadie y viven burlándose de todo el mundo. Vayan a mandar a sus casas y después vamos a hablar si usted quiere y me respeta”, expresó el purpurado.

Pidió a los dominicanos defender su identidad y no permitir que el país siga siendo "mojiganga" de organismos internacionales.